Encuentros sobre Ecodiseño & Ecointeriorismo 2012

Encuentros sobre Ecodiseño & Ecointeriorismo 2012:

La búsqueda de una mayor sostenibilidad en los proyectos de interiorismo ha de perseguir como objetivo el

mínimo impacto medioambiental, pero sobretodo el bienestar y confort de los usuarios. Los proyectos Ecos exigen un cambio de mentalidad del cliente final.

El Ecodiseño y el Ecointeriorismo es algo más que pensar “en verde”, es casi una necesidad, especialmente en las empresas. Los profesionales del sector presentes en el encuentro organizado por InfinityInner consideran que se trata de seguir criterios medioambientales, sí, pero en los que se incluye también el factor social y económico.

En los proyectos Ecos todavía falta mucha información por parte del usuario final, ya se trate de proyectos residenciales como de Contract, y todos los profesionales coinciden en potenciar una mayor difusión para promover los beneficios del Ecodiseño.

La exclusiva comunidad del sector del interiorismo, arquitectura, diseño y contract, InfinityInner, organizó el pasado 23 de mayo en Madrid el Encuentro Profesional “EcoDiseño & EcoInteriorismo 2012”, donde el protagonismo se lo llevó la ecoinnovación, su evolución y posicionamiento en el mercado actual. El marco para dicho acontecimiento no podía ser otro que Casa Decor Madrid, cuya edición 2012 celebraba su 20 aniversario.

Laura Romera, Socia-Directora de Imagen, Comunicación y Marketing 3.0 de InfinityInner, presentó el acto dando paso a Natacha Watine, Directora General de Casa Decor, quien puso de relieve el papel de la sostenibilidad, junto con la funcionalidad y la estética para mejorar las viviendas del futuro. Casa Decor, como escaparate pionero en la presentación de soluciones sostenibles, “lleva 20 años demostrando que la buena decoración es compatible con la sostenibilidad, y seguiremos haciéndolo”, destacó Watine, quien recordó que el certamen ya ponía en práctica, a través de los diferentes proyectos que muestra y cuando apenas se conocían, términos como “ecodiseño, biodegradable o diseño sostenible”.

Alfredo Villalba, Director General de Inmótica, empresa dedicada a la domótica y tecnología para edificios, resaltó en su ponencia titulada “Ecofuturo: innovación tecnológica sostenible” el uso de “tecnologías invisibles” en la creación de ambientes, como la domótica (invasiva pero muy influyente en la decoración), la neo-domótica cognitiva (el hogar se autoconfigura en modo confort y no agrede visualmente al espacio), los ambientes inteligentes (la tecnología se integra en materiales, objetos y espacios) e Internet 3.0 Smart Objects (las cosas hablan entre ellas gracias a la versión 6 de IP). Para Villalba, “el ahorro en sí mismo no es nada. El objetivo es el bienestar, la sencillez, la calidad de vida”. Considera que lo mejor es copiar a la naturaleza con sus nociones de frío, calor, humedad, etc. e ir más allá de la arquitectura para potenciar la sostenibilidad y las energías renovables. “La casa del futuro, que consiste en introducir tecnologías que no se ven, es la casa que cada uno consigue hacerse confortable”, puntualiza.

A la pregunta de qué es el Ecodiseño, Nicola Cerantola, fundador y consultor de Ecologing, responde que “son productos y servicios nuevos con criterios ambientales amplios, que incluyen otros también sociales y económicos”. La mejora de la imagen, la preocupación por el planeta y la sociedad, la provisión de materiales, la innovación y liderazgo, el ahorro de costes y la seguridad y salud son los principales aspectos que potencia el ecodiseño, valorados de forma diferente según los intereses de quienes los aplican. En cualquier caso, el paso de diseño a ecodiseño, Cerantola lo determina por la “visión del metabolismo biológico” que es infinitamente reciclable, es decir, se trata de a partir de un objeto A conseguir un B y cerrar el círculo haciendo que B vuelva al A y así infinitamente a través de esta visión sistemática de la cadena de valor 100% sostenible. “Hay que pensar que cada residuo es nutriente de otra cosa”, opina Cerantola.

Manuel Martínez Espuny, diseñador interiorista & consultor retail, es un investigador nato de todo aquello que tiene que ver con un proyecto Eco, aunque la aplicación de la sostenibilidad la ve más factible en los interiorismo de carácter Contract más que en los residenciales, tomando como referencia Estados Unidos. Lo que Espuny llama Eco Contract & Green Retail implica un cambio de mentalidad a una mayor creatividad, con el cambio de los métodos de producción siendo esto “algo más que reciclar”. Para una empresa “trabajar la sostenibilidad es ya una necesidad real”, opina el diseñador catalán, poniendo como ejemplo la cadena hotelera NH Hoteles la cual apuesta por una sostenibilidad Contract con sus llamados “Eco Meetings”, e incluso seleccionando proveedores que también apuesten por estos criterios.

Por su parte, la diseñadora Carmen Barasona alaba la oportunidad que ofrece un certamen como Casa Decor, del que es asidua participante en sus ediciones de Madrid y Barcelona, por la gran oportunidad que ofrece para presentar productos, para fomentar la creatividad y también para promover la sostenibilidad. Muchos de los proyecto decorativos sostenibles que ha presentado en diferentes ediciones de Casa Decor -por ejemplo, la “Cama columpio” realizada con palets reciclados 100% o la “Cama princesa urbana”, a partir de un andamio de obra reciclado- han tenido un gran impacto mediático y es que, como ella misma dice, “a los deshechos hay quedarles una vida bella”.

La mesa de debate que siguió a las distintas ponencias del encuentro partió de la idea de que existe un “uso y abuso de determinadas palabras que se apropian indebidamente, como el ecodiseño”, opina Jose Antonio Ruiz, arquitecto de ZON-E, quien recordaba que “eco” significa “casa “ en griego, por tanto, diseñar una casa no es nada nuevo.

Entrando ya en materia de trabajo, para Javier Palacio, arquitecto de La Habitación Verde, aunque el 80% de la carga sobre el medio ambiente recae sobre el proyectista, con un equipo implicado que entienda bien del tema, “el que lo demanda realmente es el consumidor”. Un consumidor que, según la interiorista Alicia Mesa, “no está concienciado aún y, por tanto, no lo aplica. También por el incremento de presupuesto que supone”, aunque “la gente lo ha de ver como una inversión a largo plazo”, remarca el interiorista Daniel Sastre, de Arquizano Interiorismo. Pero insiste en que en proyectos Contract, “hay clientes que no saben cuál es el beneficio del ecodiseño, por tanto, hay que hacer un esfuerzo todos -profesionales, arquitectos, diseñadores, etc.- en ponernos a la altura de otros países. En nuestras manos está”. Y en este sentido entra en escena la necesidad de una mayor formación que “falta en las escuelas”, comenta Mesa, siendo difícil encontrar asignaturas en la carrera, “algo que nos facilitaría el trabajo a nosotros”, añade la diseñadora industrial, Laura Leoz. Porque estos profesionales consideran que tienen la herramienta del conocimiento para hacerlo saber a aquellos que están fuera del sector pero “lo ideal sería que fuera mucho más amplio a nivel de sociedad”, recalca Claudia Sánchez, diseñadora, consultora y directora de diseño y sostenibilidad de Oncediez Central del Diseño. Sánchez piensa que estas aplicaciones en los proyectos de interiorismo han de surgir “por iniciativa y no tanto por necesidad o por normativa”. Por su parte, para Leoz, es más una necesidad “porque nos da difusión”. Sánchez cree que en materia de herramientas y productos ecológicos “que los ignoremos no significa que no existan” porque hay otro campo a explorar que es el de participar en la creación de nuevos materiales, “y ahí podemos participar todos”, puntualiza. José Antonio Ruiz discrepó al comentar que “no se trata de inventar nuevos materiales, sino de usar los que tenemos”.

El factor ambiental es la diferencia entre un proyecto de interiorismo y uno de ecointeriorismo donde se trata de reducir el impacto medioambiental y el profesional debe proyectar y diseñar desde el inicio contando con dicho factor, “estudiando todo el equipo y materiales de ese proyecto, conociendo su ciclo de vida”, opina Daniel Sastre. Y aunque todo ello hace que el presupuesto se dispare, Leoz cree que el profesional “necesita romperse el coco pensando en qué uso se le puede dar a determinados materiales, a partir de según qué tratamientos, antes de ver que es caro. Hay que buscar cerrar el círculo”. De hecho, para Monique Briones, arquitecta paisajista, “si dicho material está bien implantado y diseñado, es válido para cualquier proyecto”.

Desde el punto del diseño en sí, Palacios opina que se puede optimizar el producto a través de un “rigor funcional”. “Es nuestra obligación como diseñadores”, resalta, y aunque no tienen la etiqueta verde, “sí están pensados desde una estructura verde y para un uso verde”.

Manuel M. Espuny, moderador de la mesa de debate, concluyó que estos profesionales (entre los que se incluye) “están vistos de una forma extraña”, solicitando avanzar un poco más con ayuda también de una mayor difusión de todo este tema en la sociedad en general, y no sólo en el sector. Claudia Sánchez se mostró optimista al pensar que “existe un futuro diferente diseñado con todos estos criterios”.

Blog sobre cultura ecológica.

Fuenta: http://www.concienciaeco.com/2012/06/20/encuentros-sobre-ecodiseno-ecointeriorismo-2012/